Estos
días atrás han sido bastante convulsos porque, tanto Barcelona, primero, como
Real Madrid después, han sido eliminados de la Champions League por el fallo de
sus dos grandes estrellas desde el punto de penalti. Así que aprovecho estos
momentos en los que este tema está en el candelero para profundizar en este
asunto.
El
penalti es un lance del fútbol, muy, muy especial. El jugador que va a
ejecutarlo se encuentra sólo delante del portero. La pelota está a 11 metros en
perpendicular al centro de la portería de 7,32 x 2,44 (casi 18 m2). El portero
debe estar en la línea de gol y no puede moverse más que hacia los lados. La
ventaja del tirador es clara. El 90% de las veces esta suerte termina en gol...
pero hay que tener muy, muy en cuenta el 10% restante, ocasiones en las que el
portero se convierte en héroe y el jugador que ha errado en villano. Y,
lógicamente, todo esto depende de la trascendencia del resultado del penalti.
Hay
varios factores que hacen que sea más o menos importante y trascendente el
momento de lanzar un penalti:
- El momento en el que se produce
- Al principio, cuando aún hay tiempo de rectificar un fallo
- En momentos psicológicamente importantes como al final del primer tiempo, o nada más comenzar el segundo.
- Al final, cuando ya no hay tiempo para nada más
- La situación en el marcador.
- La relevancia del partido: partidos en los que un equipo se juega el título, alcanzar una competición al año siguiente, el descenso, la clasificación para la siguiente ronda o para la final.
- El rival: un enemigo acérrimo o un equipo más o menos amigo.
- La competición: no es lo mismo la Recopa de España que la Champions League.
En
cualquier caso, los futbolistas profesionales tienen, o mejor dicho tendrían
que estar preparados para ese momento. Siempre, lanzar un penalti siempre genera
una situación de estrés mayor o menor en el jugador de fútbol, que puede verse
reflejada en alteraciones fisiológicas y psicológicas como las que padecemos el
resto de los mortales cuando nos enfrentamos a algunos momentos en el
transcurso de nuestro trabajo o vida cotidiana: hablar en público, hacer una
presentación de una oferta, lanzar un producto al mercado, defender un
presupuesto, defender una idea, discutir con un ser querido, etc... ¿A quién no
le ha aumentado la frecuencia cardiaca, le han comenzado a sudar las manos, se
le ha secado la boca o le ha comenzado a molestar el estómago? ¿Quién no ha
sido asaltado por pensamientos negativos e intempestivos o ha tenido
sentimientos emocionales a flor de piel? Por eso, prepararse para afrontar el
momento crucial de lanzar un penalti es fundamental, como en todos los ámbitos
de la vida. No solo es imprescindible trabajar la técnica de lanzamiento (golpear la
pelota con el interior del pié o con el empeine, echar el cuerpo hacia delante,
etc...), sino que también es fundamental trabajar los aspectos físicos y
psicológicos para que el estrés no juegue una mala pasada.
Por
tanto para lanzar un penalti necesario tener:
- Autoconfianza total y plena, que en general va ligada al nivel de juego al que el jugador está rindiendo, sobre todo en los últimos partidos. Ayuda recordar otros lanzamientos bien ejecutados.
- Control de la situación: no tener la ansiedad disparada, pero tampoco pecar de pasotismo y sobre todo saber aceptar las consecuencias del lanzamiento, si se falla. Hay que trabajar la respiración para reducir el grado de ansiedad.
- Concentración absoluta en la ejecución del penalti de forma que incluso pueda ser capaz de visualizar la acción completa antes de lanzarla. Este es uno de los puntos en los que el portero puede influir más, distrayendo al jugador de diversas maneras.
Quizá
a alguno de los grandes jugadores que han fallado algún penalti decisivo,
jugadores de la talla de Maradona, Platini, Sócrates, Zico, Baggio, Djukic,
Raúl, Sevchenko, Trezeguet, Terry, Palermo, Cristiano, Messi y un larguísimo
etc... les faltó algo de autoconfianza, control de la situación o de
concentración o quizá simplemente golpearon mal el balón. Sólo ellos lo saben.
Todos los demás suponemos que la presión pudo con ellos.
Aquí os indico algunos de los errores desde el punto de penalti más sangrantes de la historia reciente de nuestro futbol:
- Final del mundial de 2006. Trezeguet falla el segundo penalti de la tanda inicial de cinco. Francia pierde en Mundial contra Italia 5-3 en la tanda de penaltis.
- Final del Mundial de 1994. Baggio falla el quinto penalti de la tanda inicial de cinco. Italia pierde el Mundial contra Brasil 3-2 en la tanda de penaltis.
- Final Champions League 2008. Terry, falla el quinto penalti de la tanda inicial de cinco que, en caso de habar marcado, hubiese supuesto la victoria del Chelsea y por tanto la primera Champions League para el Chelsea. El Chelsea pierde la Champions contra el Manchester United 6-5 en la tanda de penaltis.
- Final Champions League 2005. Shevchenko, falla el quinto penalti de la tanda inicial de cinco. El AC Milán pierde la Champions contra el Liverpool 3-2 en la tanda de penaltis.
- Final Champions League 2001. Pelegrino, falla el séptimo penalti de tanda (habían empatado en la tanda inicial de cinco). El Valencia pierde la Champions contra el Bayer de Munich 5-4 en la tanda de penaltis.
- Ultima jornada de Liga 1994. Djukic, falla un penalti contra el Valencia en el minuto 90 del partido de la última jornada de la Liga que, en caso de haber transformado, hubiera supuesto el primer Título de Liga para el Deportivo de la Coruña. La Liga va a parar al Barcelona.
Seguro que hay muchos más, pero creo que estos son los más importantes.
Incluso los penaltis muy bien tirados, pueden ser parados, ojo!
ResponderEliminarLa Recopa de España? Por lo demás, tres bien!