sábado, 5 de noviembre de 2011

Dibujando la calle (Entrada dedicada a Ignacio Soria)


El golf es un precioso pero difícil deporte que en España está teniendo un gran auge en los últimos tiempos. El mayor responsable de este crecimiento es, sin duda, el más grande de nuestro golf, Severiano Ballesteros que con su esfuerzo, su carácter y su genio, logró convertirse en el mejor golfista del mundo entre finales de los setenta y principios de los ochenta, después de décadas de dominio de jugadores estadounidenses y británicos.

Es cierto que luego han venido otros grandes jugadores como José María Olazabal, Miguel Ángel Jiménez, Sergio García, etc... que han seguido la estela de Severiano, pero sin duda han tenido el camino mucho más fácil.

Tanto es el auge que ha tenido y sigue teniendo, que el golf es el deporte que cuenta actualmente en España con mayor número de licencias federativas después del fútbol.

Y precisamente quería centrarme en un lance del juego del golf amateur del que no se habla en los libros, que no se enseña en las escuelas y que creo merece la pena resaltar por su importancia. No me voy a referir a la técnica del swing, a la pegada, a la ejecución de los golpes cortos, a la forma más efectiva de sacar la pelota de un bunker, al cómo jugar por abajo, ni siquiera al juego en el green, que es donde dicen los expertos que se ganan los campeonatos. No.

En realidad quiero resaltar la importancia de la negociación que se realiza en el tee del hoyo 1. Me refiero al acuerdo de cómo se va a puntuar. Este es un momento mucho más importante de lo que la gente cree, ya que en esta negociación se ganan o pierden muchas opciones de victoria al final del partido. Por supuesto el juego hace mucho, es innegable, pero la pillería del acuerdo también. Y aunque la veteranía es un grado, he visto a jugadores con una dilatada experiencia que no han sabido negociar. Y cuento esto con conocimiento de causa, ya que como jugador, aunque no muy bueno, ya he podido participar en varias negociaciones y en algunas he salido perjudicado, pero en otras, sobre todo en una de este fin de semana, muy beneficiado.

Recomiendo estar despierto, listo, vivo, no minusvalorar al contrario, hacer bien los cálculos, retener en qué hoyos hay puntos/punto de regalo, no ceder a todo lo que el contrincante propone, imponer alguna “cláusula” del acuerdo. En definitiva, recomiendo negociar y conseguir un acuerdo que beneficie tu juego: además de dibujar la calle es muy importante la negociación del tee del 1.


Andad atentos. ¿Verdad, Ignacio?

No hay comentarios:

Publicar un comentario